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#Dobleces Alianza en ruinas

 

La alianza Va por México se encuentra en una pausa, con la posibilidad de extenderse 10 meses, por ser el tiempo restante de la dirigencia disfuncional de Alejandro Moreno Cárdenas. Durante este periodo de impasse, tanto los dirigentes Jesús Zambrano, del PRD como el panista Marko Cortés apuestan por abrirles las puertas a los priistas descontentos y disidentes del […]


La alianza Va por México se encuentra en una pausa, con la posibilidad de extenderse 10 meses, por ser el tiempo restante de la dirigencia disfuncional de Alejandro Moreno Cárdenas. Durante este periodo de impasse, tanto los dirigentes Jesús Zambrano, del PRD como el panista Marko Cortés apuestan por abrirles las puertas a los priistas descontentos y disidentes del estilo de “abaratamiento político”, impulsado por la dirigencia de Alito Moreno.

Jesús Zambrano y Marko Cortés, descartaron sentarse en una mesa a retomar el diálogo de la alianza Va por México mientras, Alejandro Moreno sea el presidente nacional del tricolor. Incluso, lo catalogan como un interlocutor no válido para hablar de las alianzas rumbo a 2023, en Coahuila y Estado de México. En todo caso, dejarán en manos de las dirigencias estatales si le dan tránsito a las posibles alianzas. Mientras a nivel nacional todo se detiene.

Sin embargo, apuestan por desfondar al PRI a través de abrirles las puertas a militantes y liderazgos que, en este momento, se encuentran desplazados por Alejandro Moreno y contribuye a la división interna del partido tricolor.

Jesús Zambrano fue el primero en señalar que, ve con buenos ojos tener acercamientos con Miguel Ángel Osorio ChogClaudia Ruiz Massieu y Beatriz Paredes. Luego de la traición recibida por parte de su coordinador parlamentario, en el senado, Miguel Ángel Mancera, luego de la votación a la extensión de la presencia de las fuerzas armadas en tareas de seguridad interior. Con estos tres senadores, declarados opositores a Alejandro Moreno, tienen la oportunidad de trabajar en nuevas candidaturas y revestir a un partido, como el PRD que se encuentra en la inanición.

Con ellos, se tiene previsto comenzar a trabajar en la creación de un “nuevo bloque” de contención legislativo ante las jugadas que trazó Alejandro Moreno y que generó la separación de la Alianza Va por México.

Caso similar, los panistas llamarán a la adhesión al partido blanquiazul de aquellos militantes del PRI inconformes con la dirección de su partido, e incluso de simpatizantes o votantes de Morena, decepcionados con la actuación del gobierno de la cuatroté.

Sin lanzar un ultimátum, en este mes sesionará la Comisión Permanente del PAN para determinar si acepta o no continuar en la alianza Va por México. Pero lo contundente es que los panistas van por reforzar su estructura y retomar el liderazgo de la alianza, ya que el PRD en ese terreno sólo tiene como candidato visible al exgobernador michoacano Silvano Aureoles.

Por ello, es que en la actualidad, la suma de cuadros políticos para el PAN y PRD es una oportunidad valiosa, puesto que mientras la decisión aferrada de Alejandro Moreno de abaratar al PRI le genera estar en paz con la cuatroté, los aliados van por militantes y dejar al priismo en un vacío que desde hace más de 20 años comenzó a fisurarse y en este momento, encuentran la posibilidad de convertirlo en el aliado más achicado rumbo a los comicios de 2024.