Tras 13 días de incertidumbre y angustia, Emilio “N”, un niño de 10 años de edad, despertó luego de permanecer en coma, tras ser atropellado por una unidad de la Línea 1 del Mexibús en Ecatepec.

Su madre, Ana María “N”, relata el alivio al ser informada por los médicos de que Emilio se encuentra estable, aunque la recuperación requiere terapias especializadas.

Ante la limitada atención en el Hospital General de Las Américas, Ana María busca apoyo para trasladar a su hijo al Hospital Regional de Alta Especialidad de Zumpango (HRAEZ), donde espera obtener un cuidado más adecuado.

Ana María, apuntó la escasez de fisioterapeutas en el hospital actual, temiendo que esto retrase la recuperación de Emilio.

El incidente ocurrió el 9 de enero pasado, cuando el niño salió a comprar pan y no regresó.

La búsqueda reveló que fue atropellado en la estación Zodiaco por un vehículo articulado de Mexibús, marcado con el número 95.

Emilio, al intentar cruzar el carril confinado, fue impactado y sufrió lesiones graves, incluyendo un fuerte golpe en la cabeza que desencadenó su coma.

Protección Civil, trasladó al menor al Hospital General de Las Américas, donde permaneció en coma inducido durante 13 días para desinflamar su cerebro.

Afortunadamente, ha despertado, pero la madre relata el riesgo de secuelas, debido a la inflamación cerebral.

Ana María, busca una segunda opinión de especialistas, aunque se enfrenta al dilema de costear los gastos médicos, ya que es viuda y tiene otros dos hijos.

“No me dan esperanzas de que el niño quede como antes del accidente”, compartió, destacando su preocupación por el bienestar futuro de Emilio.

En medio de la difícil situación, Ana María, ha permanecido en el hospital desde la noche del accidente, sin trabajar. La madre hizo un llamado a la solidaridad y la ayuda, buscando opciones para costear el tratamiento y garantizar el mejor cuidado posible para su hijo en esta lucha contra las secuelas del trágico incidente.