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#Columna7 La contra marcha

Jorge Álvarez Colín
 

La respuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador, a la marcha de apoyo al INE, llegó muy pronto, una reacción provocada por el mensaje tan claro de la sociedad y que coloca al presidente contra las cuerdas, quedando claro que la sociedad mexicana está más que consciente y atenta respecto a sus libertades y derechos […]


La respuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador, a la marcha de apoyo al INE, llegó muy pronto, una reacción provocada por el mensaje tan claro de la sociedad y que coloca al presidente contra las cuerdas, quedando claro que la sociedad mexicana está más que consciente y atenta respecto a sus libertades y derechos sobre los temas democráticos. Entonces cómo dejar pasar la oportunidad para medirse y mostrar a sus correligionarios su liderazgo y autoridad, es una carta vista para todos, se observará el ejercicio y operación del poder como en los tiempos del pasado.

No se podría esperar el proceder de otra forma, cuando el culto a la persona se ve desdibujada por una postura transparente y diáfana como la que vimos en la marcha del domingo 13. Será importante observar varias cosas; ¿quiénes participarán con la obediencia ciega, ante una instrucción clara y recia?, seguramente el presidente estará flanqueado por sus corcholatas a quien por cierto y para no desaprovechar, serán vitoreados por su público, el aplausómetro estará a todo lo que da, ¿cómo se hará la movilización?, sin duda tendrá de todo para que no falte nada, ¿qué tipo de público asiste?, seguramente se pasará lista de asistencia mediante los padrones de programas sociales, ¿cuál será el discurso y respaldo hacia el presidente?, quien sin duda será vitoreado con fervor incondicional, pero sobre todo, ¿qué se espera como resultado de esta acción?, ¿su reforma se rescatará?, ¿Morena se volverá más fuerte?, ¿los personajes políticos reafirmarán sus preferencias? o simplemente se tendrán otros datos para comparar capacidades de movilización.

Lo que sí es cierto, es la diferencia de propósitos, la primera marcha fue para expresar cientos de miles de opiniones en defensa de sus derechos y libertades, la segunda, será para arengar e incentivar el público del presidente, pues es inaceptable la osadía de tener tantas y tan diversas voluntades coincidiendo, el momento está marcado por una nueva actitud dentro de la participación ciudadana en la democracia del país.