El presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, anunció el cierre de la frontera con Colombia para impedir el tránsito irregular de personas, como medida de endurecimiento en la política migratoria del país.

“Tomamos la difícil decisión de cerrar nuestras fronteras con Colombia para suspender el paso de migrantes irregulares”, advirtió el mandatario durante un acto donde impulsó la “Operación Escudo” contra actividades ilícitas, entre ellas el narcotráfico.

El cierre de la frontera coincidió con el inicio de traslado de unos tres mil 800 cubanos, varados desde hace meses en la frontera con Costa Rica, hacia México, como una escala de su viaje hacia EU.

De los más de tres mil isleños que permanecen en Panamá, 250 partieron hacia México.

“No podemos ser parte del tráfico todo el tiempo; daremos el trato digno que se merecen, pero nos toca cerrar la frontera a este flujo irregular”, sostuvo el mandatario.

Los cubanos quedaron varados en la frontera de Panamá con Costa Rica, luego que ese país se negara a aceptarlos desde diciembre, ante la negativa de Nicaragua de permitirles el paso por asuntos de seguridad.

Ante los problemas generados en las fronteras, Costa Rica y Panamá acordaron con México y El Salvador para que esos países permitieran el tránsito de los cubanos hacia Estados Unidos.