Información de Noemí Gutiérrez

Al anunciar que no asiste a la Cumbre de las Américas porque no se invitó a todos y se mantiene esa vieja política de exclusión, el presidente Andrés Manuel López Obrador adelantó que en julio visitará en la Casa Blanca a su homólogo estadounidense, Joe Biden, para analizar el tema de la integración de toda América.

Dijo que en representación de México, asiste el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard.

Enfatizó que hay buena relación el presidente Biden, ya que es un hombre bueno que estuvo sometido a presiones tanto de republicanos como demócratas.

“Puede ser que la Cumbre sea un fracaso, pero los responsables son ellos (los que se opusieron de republicanos y demócratas) por sostener una política de cerrazón y no de apertura y de este senador del partido demócrata en especial, Robert Menéndez y los dirigentes de la comunidad cubana en Florida y en Estados Unidos que tienen una gran influencia pero no la usan para hacer el bien ¿por qué seguir manteniendo los pleitos de la guerra fría?”.

Señaló que en la decisión influyó la presión de la comunidad cubana en Florida, del senador demócrata Robert Menéndez, además de hay elecciones en la Unión Americana.

“Lamento mucho esta situación, pero no acepto que nadie se sitúe por encima de los países, no acepto hegemonías, ni de China, ni de Rusia, ni de ningún país”.

Manifestó que le mandó “decir al presidente Biden que lo voy a visitar, en julio voy a ir verlo a la Casa Blanca y quiero tratar con él; el tema de la integración de toda América porque mi planteamiento es que así como se creó la Comunidad Europea y luego pasó a ser Unión Europea, así necesitamos hacerlo en América”.

Explicó que su propuesta significa un cambio en la política de dejar la confrontación, el odio, la amenaza, los bloqueos, el injerencismo y optar por la hermandad, la política de la buena vecindad.