La Consulta Popular para enjuiciar a expresidentes es un avance en la democracia del país, aunque se vote a favor o en contra, lo importante es que estos instrumentos se vayan perfeccionando para el bien de la vida pública de la nación, señaló Max Correa Hernández, diputado de Morena en el Congreso del Estado de México. 

En entrevista para CAPITAL EDOMEX, el legislador comentó que, atendiendo el llamado del Instituto Nacional Electoral (INE) sobre la restricción a promover actos respecto a este ejercicio democrático, en su carácter de ciudadano, expresa que la consulta popular para enjuiciar a expresidentes es “manera de activismo de la sociedad organizada”. 

Señaló el morenista que es un acto de relevancia como lo fue el voto de la mujer por primera vez, así como el derecho a ser votada. “Es de la misma importancia política y democrática que a los ciudadanos se nos consulte sobre cualquier tema de la vida pública”, refirió. 

Correa Hernández indicó que ya sea votar por un sí o un no, el ciudadano debe ser partícipe. 

Asimismo, el legislador comentó que luego de la consulta, se deberá trabajar en sus alcances y resultados, pues los partidos han definido que sea vinculante para que sea válida solo si hay una participación total en el país, de 38 millones de personas. 

Esta medida, informó, fue impulsada por “los partidos políticos que no llegan a cubrir ni el número mínimo de militantes que debe tener como requisito”.

“Es una incongruencia, los partidos pusieron la canasta muy elevada, con el requisito de participación, hay que bajarla para que sean ejercicios y resultados más accesibles”, consideró.

El legislador mexiquense reconoció que esta consulta también acabará con los malos manejos de la Suprema Corte de la Nación, que se ha caracterizado por ser un ente de cuotas y de cuates dependiente de quien llegue al gobierno.