La ciberdelincuencia es un negocio que representa ganancias de 6 trillones de dólares a nivel mundial, es decir, si se compara con las economías más grandes del mundo sería la tercera, detrás de Estados Unidos y China, informó Jonathan Fridman, director operativo de Avantika, empresa dedicada a la ciberseguridad. 

De acuerdo al especialista, la ciberdelincuencia funciona por tres elementos: deja exorbitantes ganancias; debido a la falta de reglamentación la probabilidad de ser descubierto es baja; y existe un amplio mercado, ya que la mayoría de la población posee un celular inteligente. 

Del 2021 al 2022 se identificó que los ciberataques aumentaron 42 por ciento, a nivel nacional. 

Éstos se han reportado principalmente a través de WhatsApp y mediante el llamado phishing, que son aquellos links de páginas falsas que se hacen pasar por una institución bancaria y/o alguna dependencia formal que requiere de datos personales. 

El gancho es “el engaño” sobre alguna actividad realizada a través de cuentas de banco, que no es reconocida por el propietario, o la respuesta a una necesidad, principalmente de dinero. 

“A las personas les llega un mensaje en donde les dice que hay algún movimiento en su cuenta o que son acreedores a algún crédito. Las personas reaccionan ante esta urgencia dirigiéndose al link que les envían, en lugar de averiguar e ir a la página segura de la dependencia o institución”, señaló Jonathan Fridman. 

En México, según el especialista, es la falta de cultura en materia de ciberseguridad lo que ha ocasionado que las personas sean víctimas de los ciberdelincuentes. 

Actualmente, WhatsApp, es la plataforma donde se ha reportado un incremento en el robo de identidad y fraudes.

“Lo que hacen es apropiarse de la cuenta de WhatsApp que tiene una vulnerabilidad, a través de un mensaje de voz se puede obtener acceso a la cuenta, apoderarse de ella y solicitar dinero a nombre de la persona a quien le pertenece el número”, explicó. 

Jonathan Fridman, apuntó que los ataques no son directos, es decir, que vayan dirigidos a una persona por lo que es, o representa, sino es un juego de números ejecutado por los ciberdelincuentes. 

“Es aventar estos ataques al mayor número de personas posibles, porque siempre habrá quien caiga. Difícilmente son ataques dirigidos, no conocen a la gente, se mantienen en el anonimato y así obtienen un negocio rentable”, agregó. 

Según el director operativo de Avantika, el tema es la falta de regulación en México del ciberespacio. 

Para evitar ser víctima de la ciberdelincuencia, el especialista recomendó no abrir links externos y dirigirse a la página oficial, donde se verifique que cuenta con el candado oficial de https, el cual indica que el sitio tiene un certificado de seguridad válido y vigente.

Ciberdelincuencia organizada

Tras la pandemia por Covid-19 el delito evolucionó, “el ciberdelincuente se especializa en la extracción de información, éste se pone en contacto con otro especialista en procesador de pagos y así han comenzado a generar redes, logrando un ataque más especializado”, señaló. 

Entre los ataques más sonados en los últimos años se encuentra el de Pemex y Mercado Libre. 

En noviembre del 2019, se dio a conocer que un pirata cibernético o “hacker”, logró infiltrarse en los equipos de la petrolera y se hizo con una cantidad de documentos e información, por la que exigía más de 96 millones de pesos por su rescate. 

El pago, según el atacante, debía realizarse en 48 horas, de lo contrario publicaría la información en la Deep Web.

En tanto, en marzo de este año, la compañía de comercio electrónico Mercado Libre, reportó que activó sus protocolos de seguridad tras detectar una vulneración a sus sistemas, que implicó accesos no autorizados a los datos de unos 300 mil usuarios.