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Aumenta en 150% la venta de ataúdes de madera

 

Más del 150 por ciento se incrementó la venta de ataúdes durante el punto más alto de la pandemia por el coronavirus, informó Marco Antonio Ruiz, presidente en el Estado de México de la Cámara Nacional de la Industria Maderera.  Según el representante empresarial, un ataúd de madera en promedio oscila entre los 900 a […]


Más del 150 por ciento se incrementó la venta de ataúdes durante el punto más alto de la pandemia por el coronavirus, informó Marco Antonio Ruiz, presidente en el Estado de México de la Cámara Nacional de la Industria Maderera. 

Según el representante empresarial, un ataúd de madera en promedio oscila entre los 900 a mil 599 pesos, en tanto que las cajas de materiales de metal están al doble de estos costos.

Debido a esta disparidad de precios, señaló, aumentó la demanda de los ataúdes de madera, situación que dio un respiro económico a los aserraderos mexiquenses ante la crisis económica que se avecinaba. 

El presidente de la CANAINMA señaló que la producción del sector bajó en un 20 por ciento a causa de que la actividad no fue considerada como esencial, afectando a cerca de 500 mil familias que dependen de manera directa del sector, tras la aplicación de restricciones para evitar los contagios. 

Debido a ello, los aserraderos llegaron a acumular pérdidas económicas que oscilaron entre 7 y 10 mil millones pesos, según lo indicó Antonio Ruiz. 

Cabe destacar que muchos de los aserraderos de la entidad cambiaron su producción por la demanda de la población, a la elaboración de ataúdes a bajo costo, por lo que en apoyo a la economía familiar estos llegaban a ser madera de dimensiones cortas o medianas.

“Tratamos de hacer ataúdes de tarima, incluso, por lo económico y la alta demanda y en apoyo a la difícil situación. Porque hay muchas familias que no tuvieron la oportunidad de llevar a sus hijos a un médico, mucho menos a un hospital, ante esta situación quisimos hacer un ataúd al alcance de la situación”, expuso.

Los aserraderos mexiquenses también se enfrentaron a la crisis económica tras la pandemia, pero mejoró gracias a la demanda de tarimas que aumentó por parte de las grandes corporaciones comerciales.