Gallos Blancos de Querétaro se convirtió en el primer finalista de la Copa MX, luego de vencer de manera dramática en penales 8-7 a los Diablos Rojos, tras empatar sin goles en tiempo reglamentario, en juego disputado en el estadio Alberto “Chivo” Córdova.

Tras 10 disparos casi impecables por parte de los dos equipos, Gerardo Flores fue el primero en fallar, con lo que le abrió la puerta a los Gallos, pero el portero Alfredo Talavera los regresó a la pelea al detener el disparo del colombiano Andrés Rentería en la fase de muerte súbita.

El villano de la película fue Francisco Gamboa al errar su disparo y dejar la puerta abierta al argentino Miguel Ángel Martínez, quien con potente disparo le dio el triunfo y el boleto a su equipo, que por primera vez disputará la final de la Copa.

Hacia el final del tiempo reglamentario, Toluca se fue con todo al frente y estuvo cerca de marcar el tanto de la diferencia, pero el brasileño Tiago Volpi se convirtió en factor, para así mandar a la definición desde los 11 pasos, donde Querétaro fue más certero para salir con el boleto a la final, en la que espera al ganador del Clásico Nacional, entre América y Chivas; si gana Chivas la final sería en Querétaro, si por el contrario ganan las Águilas, la final sería en el Azteca.

El arbitraje estuvo a cargo de Erick Yair Miranda, quien tuvo una labor aceptable. Amonestó a Luis Noriega al minuto dos y a Jaime Gómez al 74 por la visita; mientras que Gerardo Flores al 69 y Francisco Gamboa al 89 vieron cartón preventivo por los Diablos Rojos.