PET; plástico que México acumula y no aprovecha

Una escoba, una lámpara, alcancías, figuras decorativas o contenedores para guardar objetos diversos es lo que se puede realizar con el reciclado del plástico conocido como PET. Ese material transparente o de color que vemos en las botellas de plástico donde nos venden los refrescos o el agua.

En los últimos cuatro años, el acopio de PET post-consumo en México ha sido el más alto de América. Durante 2015, en el país se recuperaron 364 mil toneladas de PET usado, 50.4 por ciento del consumo aparente nacional.

Qué es el PET?

El PET es un polímero termoplástico del que no existe ningún tipo de enlace químico entre cadenas y que tarda entre 100 y mil años en degradarse o descomponerse.

La mayoría de las botellas están hechas del plástico denominado polietileno tereftalato (PET), un material además muy resistente, pues en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) han realizado estudios y pruebas que indican que una sola botella si se coloca de manera vertical y bien cerrada, resiste varias toneladas.

En el país se producen como residuos aproximadamente 140 mil kilogramos de botellas de plástico. Por este motivo las empresas recicladoras y quienes cuidan el ambiente recomiendan a la población comprar envases retornables, recipientes que sean de vidrio, reutilizarlas (usarlas como porta lapiceros, elaborar maceteros).

También separarlas, llevarlas a los centros educativos donde las acopian o a las empresas recicladoras.

En este tema, la asociación civil ambiental ECOCE, creada y auspiciada por la industria de bebidas y alimentos, celebra que México mantenga su liderazgo en la recuperación y reciclaje de envases de PET post-consumo.

Las estadísticas de ECOCE indican que 38 por ciento de lo acopiado se queda en este país para consumo de las 12 nuevas plantas de reciclado de PET (envases grado alimenticio y no alimenticio, fibra textil, poliéster, láminas de termoformado, flejes y filamentos).

Lo anterior equivale a una capacidad instalada de consumo de 208 mil toneladas por año y una inversión superior a 272 millones de dólares.

El ingeniero Jorge Treviño, director general de ECOCE, detalló en entrevista para CAPITAL MEDIA que la labor de esa empresa es facilitar el proceso del PET a través de acopio tratando de asegurar que haya un valor en el mercado de estos residuos, de envases en específico, lo que ha logrado tasas altas de recuperación del polímero.

“Nosotros ya no nada más actuamos en el caso del PET, también en otros envases de plástico y de los que usan los asociados. Se trata de una actividad con varias líneas: la primera con el sector de la pepena, otra es mediante de campañas de información y sensibilización de la población de las cuales se derivan programas de educación ambiental enfocados en recuperar envases y valorizarlos”, comentó.

Señaló que las campañas que dirige ECOCE se realizan en escuelas, en instituciones privadas y públicas, en eventos deportivos y también en apoyo a zonas marginadas del país donde existe migración, escasez de servicios públicos y bajos niveles económicos; donde se intercambian los envases de PET por productos básicos y uno de ellos se realiza en el norte de Chiapas, otro en el corredor de Palenque a Villahermosa, otros en San Luis Potosí y Saltillo. En Morelos también hay otro corredor donde se acopia PET.

El programa de acopio de este polímero en escuelas se efectúa en 65 zonas metropolitanas.

“Además de esto hacemos sinergia con los gobiernos para limpiar las áreas naturales protegidas como el Cañón del Sumidero, las playas, de tal manera que unamos fuerzas entre el gobierno, la industria y todos los actores de la sociedad para mejorar el medio ambiente”, puntualizó.

Treviño destacó que México es el país que más recupera PET en toda América, por arriba de Canadá, Estados Unidos y Brasil.

Las estadísticas de ECOCE apuntan que en 2015 se recuperó 50.4 por ciento del PET que se elabora, cuando en Estados Unidos se recupera 31 por cientoy en Canadá 40 por ciento.

“Estamos al nivel más o menos de lo que se está haciendo en Europa, porque en México estamos cerrando el ciclo que comprende que el mismo PET se recicla y se vuelven a hacer más botellas”, aseveró.

La industria nacional de reciclaje de PET, representa un consumo de 300 mil toneladas por año y una inversión de más de 314 millones de dólares. Adicionalmente, se realizan esfuerzos para construir nuevas plantas de reciclaje que hacen más eficiente a esta industria.

México es actualmente el líder en América Latina en reciclado de PET al acumular más de 2 millones de toneladas de envases, sólo el año pasado se manejaron 429 mil toneladas.

La recuperación de envases PET a la fecha significa 60 por ciento del consumo nacional, por lo que todavía existe un camino por recorrer, pero se trata de un nivel que se ubica por encima de lo que han logrado Brasil (42 por ciento), Canadá (40 por ciento), Estados Unidos (31 por ciento) y la Unión Europea (25 por ciento).

Dicho acopio ha sido equivalente a llenar 100 veces con envases de plástico el Estadio Azteca, o bien dejar de expulsar al medio ambiente 6.6 millones de toneladas de CO2, que sería una cantidad equivalente a las emisiones que captan 556 millones de árboles.

Esto significa además 8.9 millones de barriles de petróleo ahorrados, que equivalen a cerca de tres días de producción de Pemex, o bien más de 70 millones de metros cúbicos ahorrados de espacios en rellenos sanitarios o tiraderos.

Otro aspecto relevante es que si bien en los primeros años el PET se llevaba al exterior para reciclarse, actualmente 38 por ciento de lo acopiado se queda en México para el consumo de las plantas que opera ECOCE, que tienen capacidad para procesar 208 mil toneladas al año de resina y que han significado una inversión superior a los 272 millones de dólares.

¿CÓMO SE FABRICA?

El PET se produce a partir de dos materias primas derivadas del petróleo: etileno y paraxileno. Los derivados de estos compuestos (respectivamente, etilen glicol y ácido tereftálico) son puestos a reaccionar a temperatura y presión elevadas a fin de obtener la resina PET en estado amorfo.

La resina se cristaliza y polimeriza para incrementar su peso molecular y su viscosidad.

El resultado es la resina usada en la fabricación de envases. Su apariencia es la de pequeños cilindritos de color blanquizco llamados chips.

Una vez seca, se almacena en silos o supersacos para después ser procesada.

A la cabeza

México es actualmente el líder en la recuperación de envases, al ubicarse por encima de lo que han logrado Brasil, Canadá, Estados Unidos y la Unión Europea en la materia.