www.capitaledomex.com.mx

El pico del pollo

w-full h-auto eagerload wp-post-image
 

Por: Alfredo Albíter


Este alado había pronosticado que el susto por el sismo del 19 de septiembre nos habría de durar hasta el próximo lunes, pero me equivoqué. En menos de 48 horas regresamos a la grilla que enloda todo lo que segundos antes estaba a menos de dos metros del Olimpo… Dejaré, por decisión propia, el tema Frida Sofía para otra ocasión, justo para no caer en la descalificación fácil y la conclusión parcial de temas que tienen al tiempo como única coincidencia… Ya regresamos a las estrategias políticas para denostar a contrincantes, similar a las peleas de todos contra todos de Triple A.
¿Dónde estaban esos diputados y senadores después del sismo? De baquetones, de fiesta, escondidos en sus mansiones, de viaje en otro país con su risa insensible los apabullaron en redes sociales. Ya imagino si a uno sólo de ellos se le hubiese ocurrido pararse en algunas de las zonas críticas. Seguro que de oportunista no se le hubiese bajado. Por supuesto no asumo su defensa, simplemente ejerzo mi derecho de opinión y análisis sobre algo que es real en redes sociales y lleva todo el sello de los partidos políticos, así en plural y sin que ninguno de ellos se salve. Si se trata sólo de catarsis, pues orales está bien, pero podríamos hacer uso de otros temas o referencias que no lleven a la inhibición de la solidaridad.
Hemos regresado de nuevo a la impaciencia del día a día… El otro tema que no puede pasar de largo es “donar” 20 por ciento del total de prerrogativas que se le está exigiendo a partidos políticos. Aunque comparto la petición, no es lo mismo con la forma. No podemos, ni debemos exigir cosas violentando la ley.
O sea, nos quejamos, luego pedimos se haga, siendo selectivos, más tarde nos exculpamos con el pretexto de que ellos lo hacen todo el tiempo y finalmente, todos queremos asumir la paternidad de un tema viciado de origen… Regresamos ya, el susto de un sismo que paró nuestros corazones en 7.1, pasó demasiado rápido. La suspicacia gana espacio, lo peor es que ya nos involucra a todos…Cierro pico. Shalom.