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Todo el poder. El candidato del PRD, Juan Zepeda, congregó a más de 65 mil mexiquenses en Neza.

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El perredista fue arropado por Miguel Mancera y Silvano Aureoles


El perredismo mexiquense se hizo presente en el municipio de Nezahualcóyotl, al reunir a 60 mil simpatizantes y militantes, según cifras de los organizadores, que se dieron cita en el primer mitin masivo de Juan Zepeda, candidato del PRD a la gubernatura del Estado de México.
La Ciudad Deportiva fue el lugar donde desde temprana hora cientos de personas portando playeras, gorras y banderas en alusión a Juan Zepeda y al PRD, así como de agrupaciones políticas afines al instituto político, arribaron entre porras y consignas de apoyo, ocupando las miles de sillas dispuestas.
Antes de ingresar a la plancha asignada para el evento, los asistentes recibieron de los organizadores, botellas de agua y naranjas, así como la instrucción de dónde se encontraban los baños y que al final depositaran la basura en los contenedores, aunque después del evento muchas de las botellas y cáscaras terminaron en el piso.
Poco a poco los espacios se fueron cubriendo de amarillo y negro, los más cercanos al escenario eran los más peleados, todos querían estar cerca del candidato. Así transcurrieron las horas y minutos desde aproximadamente las 8:00 horas, cuando arribaron los primeros contingentes, hasta pasadas las 11 de la mañana, cuando en el escenario apareció Juan Zepeda, arropado por la dirigencia nacional y estatal de su partido, así como por el gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, y por el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera.
Las banderas ondearon y los gritos de “Sí se puede” causaban euforia entre los asistentes, quienes de pie ovacionaron a Zepeda, que extendía su mano como si quisiera saludar de mano a cada uno de los presentes, para después llevarla a su pecho, como signo de agradecimiento ante las muestras de apoyo.
Después de Aureoles y Mancera, el turno al micrófono fue para la lider nacional del PRD, Alejandra Barrales, al igual que quienes la presidieron, fue recibida entre porras, para sentenciar a todos los que tenían dudas o a quienes no les bastó el mitin del sábado en la Plaza de la Constitución de la Ciudad de México, que el PRD está vivo y que hay partido para rato.