www.capitaledomex.com.mx

Avanza lento el nuevo sistema penal acusatorio

w-full h-auto eagerload wp-post-image
 

El proceso exige una actualización legal permanente, la aceptación social y el uso de tecnologías para garantizar los derechos humanos de la gente


El Nuevo Sistema de Justicia Penal Acusatorio camina lentamente y no ha cumplido, hasta el momento, con el objetivo de despresurizar las cárceles, consideró José Antonio Álvarez León, quien es doctor en Derecho y Política Criminal, por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Fue el pasado 18 de junio de 2016 cuando entró en vigencia el nuevo sistema de justicia en México, el cual contempla los juicios orales, además de otros procedimientos que plantean la solución de conflictos a través de la justicia alternativa y los procesos abreviados, siendo uno de los objetivos despresurizar el sistema penitenciario.
Álvarez León indicó que con el sistema penal anterior, en el Estado de México, quienes resultaban procesados en un juicio, representaban dos por ciento de personas sentenciadas, de manera condenatoria, es decir, que estaban dentro del sistema carcelario.
Con datos procesados de finales del año 2016 y principios de 2017, en el caso del Estado de México, refirió el especialista universitario, a varios años de haber iniciado el nuevo sistema, el corte, en datos duros, es el mismo, más o menos dos por ciento de personas, que están dentro del sistema carcelario, con sentencia condenatoria.
“Curiosamente, uno de los ejes del nuevos sistema de justicia era despresurizar el sistema carcelario, pero estamos viendo que arroja el mismo número de personas procesadas y sentenciadas”, puntualizó el académico.
Donde sí se presentó un cambio, explicó José Antonio Álvarez León, es en el porcentaje de las personas que inician o que están involucradas en un proceso de investigación, antes llamado de averiguación previa y ahora inicio de carpeta de investigación, donde existe una variación de aproximadamente 15 por ciento menos.
Ese 15 por ciento, abundó el doctor en Derecho y Política Criminal por la UNAM, corresponde a las personas o los casos que encontraron una manera diferente de solucionar su conflicto, por lo que evitaron la parte procesal y al sistema carcelario, lo que indica un cambio en la cultura jurídica, de tratar de arreglar las cosas por otras vías o buscar medidas alternas.
“Apenas empezará a redundar los frutos idóneos”, precisó el académico de la Universidad Nacional Autónoma de México, quien puntualizó que por un lado si empieza a cambiar la mecánica de los procesos de investigación y de involucramiento en causas penales, pero por el otro, todavía es alto el número de personas en la cárcel.
Uno de los defectos, a decir del especialista, es que gran parte de los delitos, hablando del Estado de México, pero que también es un problema de la Federación, especificó el doctor en Derecho y Política Criminal, son los delitos considerados graves, ya que mientras existan puniciones altas, los beneficios de este nuevo sistema de justicia penal acusatorio siempre estarán limitados a los métodos procesales o a que el Ministerio Público (MP) señale a los presuntos responsables, como a los imputados, como personas peligrosas o que puedan evadir la acción de la justicia.
“Esos matices todavía dificultan el tránsito, pero me parece que lentamente se camina hacia la nueva cultura jurídica, en el Estado de México y en la federación”, puntualizó a CAPITALMEDIA José Antonio Álvarez León.