LONDRES (AP) — Gran Bretaña está estudiando cómo tratar el tema de los hijos de ciudadanos británicos que viajaron a otros países para ayudar al grupo Estado Islámico, declaró el canciller británico Jeremy Hunt.

Hunt le dijo a la BBC el domingo que él y la secretaria de desarrollo internacional Penny Mordaunt están estudiando cómo traer al país a los hijos sin tener que enviar a funcionarios a Siria donde podrían estar en peligro.

Las declaraciones surgen después de que una británica llamada Shamima Begum de 19 años perdió a su bebé poco después de dar a luz en un campamento de refugiados en Siria.

El pasaporte de Begum fue cancelado cuando ella pidió que se le permitiera regresar a Gran Bretaña. El secretario del interior Sajid Javid dijo que la joven no expresó arrepentimiento alguno por los crímenes cometidos por el grupo extremista.

El diario The Sunday Times reporta que se tomaron medidas similares con otras dos mujeres británicas que tienen niños pequeños en Siria.